Ley Núm. 225 del
año 1999
(P. de la C. 2491) Ley 257,1999
Para designar Escuela Superior de la Comunidad Ileana de Gracias en Vega Alta
LEY NUM. 257 DEL 15 DE AGOSTO DE 1999
Para designar la nueva escuela superior en
el Barrio Bajuras del Municipio de Vega Alta, como Escuela Superior de la
Comunidad Ileana de Gracia.
EXPOSICION DE MOTIVOS
La
nueva escuela superior de la comunidad, en el Barrio Bajuras, Carretera Estatal
Núm. 2, en el término municipal de Vega Alta, merece ser designada con un
nombre que sirva de ejemplo e inspiración para la juventud vegalteña, y que sea
un reconocimiento a la labor del maestro del salón de clases.
La
comunidad vegalteña, luego de un proceso de consultas, que incluyó vistas
públicas, escogió el nombre de la educadora y orientadora Ileana de Gracia,
para designar la nueva escuela superior.
Esa determinación fue ratificada mediante la Resolución Número 14, Serie
1998-1999, de 9 de febrero de 1999, de la Asamblea Municipal de Vega Alta.
Ileana
de Gracia fue la última de los once (11) hijos del matrimonio constituido por
doña Carmen Carrión y don Herminio de Gracia.
A los nueve (9) meses de nacer Ileana, falleció su padre, dejando a una
joven viuda con once (11) hijos, y sin recursos económicos, pero con un
ejemplar espíritu de lucha. Y la joven
viuda se dispuso a criar a su familia, devengando el sustento diario en una
máquina de coser.
Los
desvelos de aquella madre fueron compensados.
Su pequeña hija Ileana, con preclara inteligencia y gran dedicación,
logró aprobar sus grados de escuela elemental e intermedia con altos honores, y
recibió una medalla por su proficiencia en el idioma inglés. En aquel entonces no había escuela superior
en el Municipio de Vega Alta, por lo que la joven Ileana cursó estudios en la
Escuela Superior Dr. Agustín Stahl, en Bayamón, graduándose con altos
honores. Ingresó, con matrícula de
honor, a la Universidad de Puerto Rico, y haciendo buen uso de la ayuda que
recibía de una hermana y un cuñado, completó un grado de Bachillerato en
Educación con concentración en inglés, en apenas tres años y medio. Ciertamente, estudió con prisa, porque tenía
urgencia en trabajar, y poder darle la mano a su mamá, reciprocando sus
esfuerzos, sacrificios y esmero.
En
1949, Ileana de Gracia se inició como maestra en la Escuela Intermedia Jesús T.
Piñero, en el Municipio de Manatí, y allí comenzó a ejercer su vocación magisterial, para hacer realidad su
aspiración de promover la superación de sus estudiantes mediante la educación.
En
el 1952 pasa a prestar servicios en su pueblo natal, como parte de la facultad
de la Escuela Intermedia de Vega Alta.
Ileana
de Gracia no limitó sus esfuerzos al salón de clases. En el Municipio de Vega Alta asumió posiciones de liderato en
distintas actividades escolares, tales como en competencias deportivas y
académicas, actos de graduación y comités de padres y maestros, así como en la
creación de organizaciones estudiantiles como el club de la Cruz Roja, Futuros
Maestros, Pen Pals y para la enseñanza de bailes folclóricos. Unió esfuerzos con otros maestros para dotar
a su pueblo de Vega Alta de una escuela superior. Ante la carencia de un plantel para establecerla, se utilizaron
espacios en una logia, en la iglesia, en facilidades municipales y hasta en el
garage de la residencia de un ciudadano particular.
La
vocación de servicio de Ileana de Gracia le llevó a promover el movimiento
cooperativista, ocupando cargos de responsabilidad en la Cooperativa de Vega
Alta así como en la Cooperativa de la Asociación de Maestros. Fue coordinadora del Concilio de Niñas
Escuchas; perteneció a la directiva de la Defensa Civil; formó parte de la
Junta Local de la Asociación de Maestros, del capítulo local de la Asociación
de Enfermedades de las Vías Respiratorias y el de la Liga Contra el Cáncer.
Sus
esfuerzos por la educación y por el mejoramiento de la comunidad vegalteña no
le impidieron continuar su superación profesional. Su habilidad para tratar con los estudiantes y su identificación
con los problemas e inquietudes de éstos le hicieron merecer una licencia para
estudios. Ileana de Gracia utilizó muy
bien la licencia que se le concedió, y le fue conferido un grado de Maestría en
Orientación y Consejería, con honores.
De ahí en adelante sus esfuerzos profesionales se dirigieron a proveer
orientación y ayuda a estudiantes y padres.
Su hogar era una extensión de su oficina, y siempre estuvo presta para
brindar sus servicios, sus consejos y su orientación. Fueron muchos los que, recibiendo la asistencia de Ileana de
Gracia, dirigieron sus pasos hacia las aulas universitarias, y pudieron
convertirse en profesionales de provecho.
La
mano amiga de Ileana de Gracia se extendió hasta la Escuela Industrial para Mujeres, en el Municipio de Vega Alta,
y allí brindó su orientación y apoyo espiritual a muchas reclusas.
El
nombre de Ileana de Gracia evoca, en la comunidad de Vega Alta, el ejemplo y
recuerdo de una vida dedicada al apostolado de la educación, y la vocación de
servicio a los demás con aspiración de enaltecer los más altos valores
espirituales del ser humano.
Muchas
escuelas, en todo Puerto Rico, llevan el nombre de líderes políticos, de
escritores, de periodistas y de otros puertorriqueños que merecen ser
reconocidos. La labor del maestro del
salón de clases, que imparte educación sin esperar a que se le haga parte de la
historia, habrá de recibir justo reconocimiento, con la designación de la
escuela superior del Barrio Bajuras del Municipio de Vega Alta, como
"Escuela de la Comunidad Ileana de Gracia".
DECRETASE POR LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE PUERTO RICO: